El año ha empezado con esa imagen que nos manda Camilo de las Pistas de Miguel Ángel Sol inundadas, con el firmamento oscuro, y toda el agua gratis (sin permiso de ningún iluso comunitario), que el cielo nos ha regalado por Reyes.
También podemos ver a un Papa Nöel acamilado trotando para darle felicidad a otros seres humanos, el mismo Papa Nöel que deambula por los tejados y soportales de la urbanización cuidando, sin presumir de ello, por aquella "isla afortunada".
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