sábado, 2 de abril de 2016

VETERANOS DE CIEN MIL BATALLAS


Empezar un partido haciéndole un ace, tipo ·psicólogo", al Gran Fede ya es motivo para pasar a la historia. Lástima no haber recogido en video las carcajadas de los cuatro en ese arranque, sobre todo las del Gran Fede, maldiciendo que todos los años se lo hago al comienzo del primer cruce. Realmente la crónica debería terminar aqui. ¿Para qué más? El resto es un sinfín de despropósitos de dos lisiados intentando pasar la reválida de cuarto (Plan Antigüo). Rafa Hermano con las rodillas a punto de infarto, y bien que lo siento Hermano, pero la única solución, tras inyertarte ácido hialurónico para nada, es ponerte unas prótesis de gacela del desierto, hechas con una mezcla de ibupropheno y grapheno, y no abandonar el pundonor que te caracteriza. De todas formas tu esfuerzo será de nuevo premiado este verano cuando de nuevo ganemos el título de dobles.
El otro "tocado" ha sido el Gran Fede que, tras el ace del psicólogo, al dar un revés cortadito de los que lo han hecho famoso en esta Galaxia, le reventó el epicóndilo de abajo del brazo derecho, dejándome sin Reflex a mi y sin codo a él. O sea, un partido teniendo que escuchar Teo y Yo (los más jóvenes tras los 55 años), las lamentables disculpas y lloriqueos de estos dos aspirantes al INSERSO con caracter indefinido.
El mejor de los cuatro, y me cuesta reconocerlo porque cuando actua de mi compañero es siempre un manta pegado a una raqueta, ha sido Teo, en la red y en el fondo y con ese saque chusco que está de ejemplo, en las Escuelas de Tenis del Mundo Occidental, como el más malo posible de todos los imposibles a partir de cierta edad. Yo he jugado bien aunque acuciado por los gestos de mi Rafa del Alma y sus cabreos continuos (de lo único que no se ha quejado hoy es de las ranas; sobre todo porque en El Portil no hay ranas)
Asi que nos han ganado en brava liz sin merecerlo, ya que me han cantado "fuera" unas cien mil bolas que han dado en la línea (efectos del ojo de halcón de sus muchos años y de su coquetería en no ponerse gafas) Pero eso me pasa por jugar con los de la tercera edad y mucha mala leche. Gajes del oficio.
Mañana en Las Azules un partido como Dios manda: Eliseo y José contra Antonio Carvajal y un servidor de mi mismo. Habrá crónica.