domingo, 15 de noviembre de 2015

PALIZÓN

Nos dieron La Paliza del Invierno. Teo y Yo nos hemos enfrentado con dos Cyborg de otra Galaxia, dos tanques de la Segunda Guerra Mundial, dos voleadores de la escuela de Stephan Egvert. Nada que hacer. Y la cosa es que los tres primeros set han sido muy peleados y con jugadas de los cuatro en la red poco habituales, devolviendo bolas los cuatro a cual con más mala leche. Pero al final el tanteo se ponía siempre a favor de ellos. Al menos mi compi Teo ha sido el más regular de los cuatro. ¡Ha perdido todos y cada uno de sus saques! Histórico o histérico me tenía. Y encima me ha quitado mil bolas que eran mías y no ha ido a quinientas que eran suyas. Pero bueno es un gran compañero y un mejor amigo. Antonio Carvajal un auténtico crack en la red, ha sacado voleas del mismo suelo y las ha puesto todas en los lugares más inalcanzable. Eliseo como siempre, un fajador nato desde el fondo y con buenas subidas a la red. Le encanta machacarme el revés aunque eso da pie a cinco a seis pases de bola del uno contra el otro que luego aplauden los otros dos. Teo ya lo he dicho, a punto de jubilarse como Jefe del Servicio de Neumología del Hospital Macarena donde seguro que le hacen una fiesta el día que se vaya; una eminencia más que perderá España y un tenista a horas completas que ganaremos nosotros. Y Yo bien pero no lo suficiente.
Mañana me enfeento de nuevo con mi alter ego Rafa Canto tras el empate del viernes pasado. Arderá Troya.