viernes, 15 de noviembre de 2013

¡POR FIN UN INDIVIDUAL!


¡Por fin un individual con una persona honesta y treinta y tantos años menos que yo! 
El partido empezó fatal para mi. Notaba mi falta de combates individuales. Juan Martín se puso 4-0 antes de que me diera cuenta de lo mal que yo lo estaba haciendo. Pero conseguí empatarle 5-5. Fallé mi saque para el tiebreack (como un Nadal cualquiera) y me ganó el primero por 7-5. Una hora para un sólo set. Pero como siempre, el segundo set me lo tomo como si nada hubiera pasado. No obstante, Juan estaba hoy muy combativo; se nota que está ya preparando la próxima marathon de Sevilla. Volvimos al 5-5 solo que yo estaba ya bien caliente y en, esas circunstancias, es difícil pararme. Le ataqué el revés que es su golpe más flojo y, sobre todo, a las esquinas. Y me llevé el set por un 5-7. Aún nos quedaba tiempo de pista y en menos de veinte minutos le hice un rosco de Navidad. Por algún extraño motivo él se vino abajo y a mí me encanta terminar las faenas a lo Curro Romero.
Una buena mañana que me ha preparado para el encuentro del domingo donde Enrique y yo lo tenemos complicado contra Teo y Paco Barral, los pasabolas titulados.