Para olvidarlo. ¡Vaya partido en las Nuevas Pistas Azules con las malditas bolas HEAD Azules que ha sacado Eli y que botan más que un canguro con hambre! Es la primera vez que acabo desesperado un encuentro. Le han echado a mi compi el 95,7% de las bolas y creo que éste sólo ha conseguido pasar cuatro. Y los otros dos, Eliseo y Javier en plan muro. La verdad es que Javier en la red es un crack; salvo dos drives míos a la barriga a unos 220 Km/h, lo de más lo ha pillado todo y puesto inalcanzable. Desde el fondo todo lo devuelve y como a mi compañero le gusta más ver el tenis que jugarlo, pues nada, que no se movía ni soplándole. Y qué decir de Eli. Tan monstruo como siempre, tan pegador como de costumbre, tan devolviendo todo a Eduardo mientras yo me aburría como una marsopa en primavera.
Lo dicho, como mi compi no se ponga las pilas, cambie de raqueta, se ponga gafas, deje de pensar que los de enfrente son mejores, venga a la pista con ánimo inquebrantable de ganar a toda costa, se mueva de vez en cuando hacia los lados, y deje de mandar la bola a Khatmandú, con eso drives locos que zumba de vez en cuando, yo me busco otro compi que haya hecho la mili como Dios manda.
Lo siento Rafa Canto, el martes voy a llegar a la pista con un escapulario de Djokovic pegado en la espalda, que por cierto acaba de ganar, por tercera vez, el Abierto de Australia.
